25 de junio de 2006

Primavera Sound 2006: la otra crónica (I)




(A pesar de ser un relato inspirado en hechos reales, los nombres de personas y grupos musicales han sido cambiados con objeto de preservar su intimidad, tan cara hoy en día. Cualquier parecido es fruto de la ingenua coincidencia o de vuestra imaginación, no tan ingenua)


Jueves, 1 de junio


SMS, SOS. Los amigos se encuentran.

Bip, bip, bip. La alarma me levanta de la cama. "Sergi, es la hora." Es pronto, pero el hecho de levantarse por gusto, y no para ir a trabajar cambia totalmente la perspectiva del día. ¡Sí, por fin es jueves! Envío un mensaje a Quico, quien ya debe hacer un rato que pulula por la Barcelona modernista, de diseño, incívica, culé, etc., etc., sms que contesta rápido:

"Tunannnnteeee. Es muy pronto todavía para quedar. Descansa. ¡Barcelona está llena de chiquillas estupendas!".

Este tío escribe sms igual que habla, es el mejor. Gran reportero dicharachero, al que, ya ahora lo puedo decir, siempre agradeceré que haya dado a conocer al gran cronista John Cheever. Un viaje en metro, y los dos amigos nos encontramos en un abrazo. Lástima que el gran Xavi (Safi para los futboleros), no podrá acompañarnos todo lo deseado este fin de semana: esa gastroenteritis provocada seguramente por el poco alcohol ingerido en las últimas semanas (sí,
poco, porque el alcohol nunca es demasiado) le han hecho pronunciar esas fatídicas palabras que tanto gusta y usa: "Estamos jodidos, tíos". Ja, ja, ja, otro que es el mejor.

El diseño, según Darwin

Tras un breve (o no tan breve) descanso en casa, nos dirigimos al corral, esto... Al recinto del fórum para empezar a disfrutar de las primeras sesiones en directo, así como de los primeros pases de modelos, temporada de verano 2006. El diseño avanza, que diría Charles Darwin, si viera la fauna que se deja caer por el festival. ¿Un aliciente más? Estamos en Barcelona... ¡Pues claro!

Se une Chusmi

La aventura primaveral de este año cuenta con un nuevo valiente, amigo de Quico, igualmente dicharachero. Chusmi es el perfecto ángulo para este trunvirato de personajes, todos ellos fácilmente hipnotizables, quedándose con cara de empanados ante el menor sonido que provenga de un escenario. O como dicen ambos, lástima que no pueda ser en el comedor de su casa, que la música está hecha para esos lugares más íntimos. ¿Iluminados? No, me encanta la idea...

Compramos tickets para las bebidas, para al cabo de unas horas recordar que, con los pases de prensa los reporteros tienen alcohol gratis. Suerte que teníamos a Quico entre nosotros para urdir una solución, aunque eso se explicará luego...


Lanzamiento de bolas de plata

Los primeros en disfrutar de la presencia del trío cósmico de personajes (como me encanta hablar de nosotros en tercera persona...) son The Drones. Un buen inicio de festival para todos, que precede al invento del siglo, a los friquis más friquis del fin de semana musical: No-Neck Blues Band y su free jazz de circo, de parada de los monstruos, de violencia auditiva. Mientras los "disfrutábamos" en las gradas, degustando unos buenos bocadillos (cada uno de ellos, con el nombre de algún artista musical: Madonna, Lou Reed, Motorhead -el de chorizo picante- o Sisa -el de pa amb tomàquet i pernil salat o jamón serrano- son unos pocos ejemplos). Simpático el invento y buenísimos los bocadillos, además. Nada de pan ultracongelado, ablandado más que el mucho-más-chicle Boomer. Mientras cenábamos con el lujo de tener actuando delante nuestro a esos friquis Másters del universo del Blues, vemos acercarse entre la poca multitud (en el escenario mas grande ya tocaban Motorhead, quiero recordar) a unos viejos amigos, que llamaremos Ira y Georgia, por respetar el anónimato, y que estropearíamos si dijéramos que forman parte de Yo La Tengo.

Nuestros anteriores encuentros con ellos siempre han sido apoteósicos: aquella visita al Kafé Antzokia de Bilbao en diciembre de 1997 (Gabilán, repítelo en voz alta: "Hello, Ira. Well, I come from Oviedo, where you fight against a guy. And I
"tuk" (sic) the guitar...") o aquel maravilloso concierto en el estudio de BTV en 2001 (gracias Ignacio). Y claro, era una falta de educación no saludarles: así que Quico, ni corto ni perezoso, se acaba el bocadilo, forma una bola con el papel de plata, apunta y dispara contra Ira. Uno de los tubulares de la torre en la que esta apoyado el guitarrista lo salva, pero no así con la segunda bola fabricada, que impacta directamente contra su cabeza. Sorprendido, Ira sigue disfrutando del concierto de No-Neck Blues Band, en su íntimo anonimato entre el público, hasta que, como dos sinvergüenzas, después de haberle lanzado la bola de plata, nos atrevemos en acercarnos para saludarle y charlar un poco con él. Una pena no hacernos la foto de recuerdo: Chusmi se había olvidado la cámara y yo no la quise llevar. Yo La Tengo también son los mejores. ¡Como No-Neck Blues Band, aunque ese día no entendiéramos un carajo!

Más conciertos y el hombre orquesta

Se disfrutó un rato con Motorhead (¿cuántos de los allí presentes no habían escuchado nunca un sólo disco de esta gente?), con la multitud que forman en el escenario I'm from Barcelona (qué nombre más precioso), se hizo piña con el cantautor Remate, siempre tan bien acompañado (o eso me pareció a mí), se disfrutó a 12twelve una vez más (y van...), las risas que nos pegamos con el gilipuertas de Baby Shambles, y con Yo La Tengo, pues tampoco hicieron un mal concierto, a pesar de los devaneos ruidosos de Ira, y su tendencia a creerse mejor multiinstrumentista que guitarrista (¿le debía doler la cabeza por el lanzamiento de bolas de plata?). Ira ahora el piano, Ira ahora la guitarra, Ira esto, Ira lo otro... Ira, el hombre orquesta, que también canta con voz de falsete en el próximo disco, y que nos ofreció una gran Tom Courenay, una bonita Stockholm Syndrome, y una brasa final con I heard you looking. El resto temas nuevos, con abuso, nuevamente del pianista Kaplan.

Conclusión primer día

En fin, como dirían Quico o Chusmi un primer día paisajístico, en el que se mostraron muchos horizontes, todo muy clarividente y emocional, y etc. etc. Y síííííííí, claro, rodeados de esas chiquillas moderniquis tan bien engalanadas para un festival de rock independiente. ¿Los chiquillos? Haberlos, habíalos. Pero al rival, ni agua, ya sabéis.

Pues con eso y un bizcocho...

(continuará)

11 comentarios:

sergisonic dijo...

Y digo yo: ¿cómo no me va a gustar una recomendación tuya? Y más ahora, que estoy disfrutando con "Las palabras andantes"... Tu credibilidad SIEMPRE sube enteros, , y sabes que en todos los aspectos: literarios o sms que clavan las preocupaciones, o dicen verdades e rojo. Eres peor que la gasolina. Y subes, y subes... Abrazos!

manuel_h dijo...

interesante crónica, aunque se te olvidó enseguida preservar ciertos anonimatos.

Zifnab dijo...

Yo me apunto al summer a ver que tal anda que el primavera me pilla lejos. Ganas tengo de ver a los I´mf from Barcelona en directo. En fin a ver que tal Belle and Sebastian que también son muchos

Se feliz

Anónimo dijo...

como te lo pasas, q bien...y me voy a quedar también con la recomendación de raule.
besiños.

siloam

sergisonic dijo...

Que no Manuel, que no. ¿Qué te hace pensar que los nombres no son pseudónimos? ;-)

un saludo

sergisonic dijo...

Zifnab, mi hermana me ha fastidiado el Summerfest. Mira que hay fines de semana y ha de casarse precisamente ese. Sé feliz también.

Saludos sónicos

sergisonic dijo...

La pena es que no haya momentos como éstos, con gente como ésta, cada fin de semana, Siloam. Un petó.

sergisonic dijo...

Continúa, continúa, Mamen. A ver si con igual sentido del humor... :P :P :P

Un beso graaande

Anónimo dijo...

Me he tomado un zumo mientras te escuchaba, si sigues me tomo otro. Voy a buscarlo :)

Besitos

Anónimo dijo...

Sergi, se te ha olvidado otro concierto muy grande de Yo la tengo(con tortoise) en el apolo de barcelona, al que algunos entramos por los pelos y por la puerta de atrás.

damián

Anónimo dijo...

Está bien, Serge. Ahora cuenta lo de la tipa aquella que, efectivamente, te practicó una felación en medio de la pista en Ellen Alien. Aún recuerdo lo flipado que me dejó cuando se arrodilló... Y cómo bombeaba! Bueno, qué coño: cuéntalo tú. Diles, diles

besitos (en el papo)