30 de julio de 2009

Recuerdos de [n] noches de verano; [n-1]

[n-1]

Nanocráteres epidérmicos. Volcanes polaroid. El sueño de [n] noches de verano en erupción. La huella del sol. Cada punto es infinitesimal. Cada recuerdo es infinitesimal. La huella del sol es el caballo de Atila y Nivea no puede con ella. Factor 15 contra la memoria es un título basura. El TDT no sintoniza. Las rayas de CANAL+ dejaron de esnifarse gratis. Ya hace años, de aquello. Muchos tabiques nasales destrozados. Somos cortos de vista. El TDT es el nuevo LSD. La cultura del LSD en un mando a distancia y los tabiques nasales desintonizados. Como una copa de whiskey. O veinte. ¿Cuándo es mañana? Ya sólo hay recuerdos solares. Manchas solares en tu piel. Que los recuerdos sean el cáncer de la memoria es algo que no alcanzo a comprender.

2 comentarios:

Clifor dijo...

Vendí mi LCD de plasma para comprar un tocadiscos. Ahora no encuentro vinilos. Hay drogas que dejaron de fabricarse. El cáncer y el olvido, la metáfora constante de un verano de sube y baja. ¿Dónde quedarán todas esos anuncios que nadie mira mientras hace zapping? ¿Existe un cielo para la publicidad? ¿Vivirá Cobi reinando entre todos esos cadáveres?

ybris dijo...

Es que los recuerdos no son el cáncer de la memoria.
Por lo menos siempre.

Abrazos.